El patito feo es el cuento infantil, donde el principal personaje fantásticamente cambia de esa condición a la de un patito bello, hermoso. Explicando más o menos ese guión, tomando esa analogía titula y explica el
diario EL COMERCIO de Ecuador la evolución de una variedad de cacao clonado
al que se ha denominado con las siglas CCN-51.
La historia podría ser irrelevante pero se vincula a nuestra
realidad y nuestras posibilidades de crecimiento. El cacao es una alternativa
económica irrefutable en Loreto, las inversiones en Tamshiyacu así se proyectan
y frente a esto han surgido con muchos pretextos algunos aspectos contrariantes
que con seguridad serán superados.
La mencionada publicación habla que en “un mundo de exquisitos
aromas y sabores, el CCN-51, el cacao clonado ecuatoriano, rechazado en
principio por su acidez, conquista a los chocolateros del mundo y emerge como
estrella en los mercados del grano”, sin embargo en la trayectoria de la
explicación y el comentario se llega a tocar aspectos que implican la actividad
agroforestal y económica de este grano en el Mundo.
Dice -refiriéndose a esta variedad de cacao- que es el “patito feo”
transformado en “cisne” que fue rechazado al principio y ahora envidiado por su
calidad, resistencia y productividad que hizo de Ecuador uno de los líderes
mundiales del sector, contribuyendo a este crecimiento con bases reconocidas en
cifras oficiales.
El cacao es una de las prodigiosas plantas oriundas de la Amazonía
que, en esta etapa de la humanidad, se proyecta como punto de apoyo para el crecimiento
de la economía de los pueblos de Loreto, que dicho sea de paso atraviesan una
de las más severas crisis de su historia con la caída irreversible de la
explotación petrolera y la inhabilitación de la actividad forestal.
El tema debe interesar a los peruanos y particularmente a los loretanos, porque este aplaudido cacao que se luce exquisito y cotizado en los mejores paladares
chocolateros del mundo es conocido como el cacao nativo, un grano originario de Iquitos
y de la cuenca del Amazonas. El mismo diario El Comercio describe con claridad que “el
agrónomo ecuatoriano Homero Castro hizo un injerto de varias cepas de cacao
para combatir las plagas que azotaban los cultivos de cacao tradicional. El
resultado fue el CCN-51 (Colección Castro Naranjal), un clon resistente a los
males, creado a partir de cepas Iquitos (ecuatoriano-peruana, 45,4%), Criollo
(Amazonia, 22,2%) y Amelonado (Ghana y Centroamérica, 21,5%). Pero la industria
internacional marginó a esa variedad por su acidez y astringencia, unas
características que reñían con la fama mundial del cacao fino y de aroma
conocido como "nacional" o "de arriba", algo que más pronto
que tarde los cultivadores descubrieron la forma para contrarrestar su acidez.
Una explicación que tiene el otro lado de la moneda, se presenta
en el momento que se produce una alta producción y se comprueban las
exquisiteces de esta variedad, comentándose que el CCN-51 tiene un "sabor
elegante y más manteca que se derrite bien en la boca".
Ecuador se ha proyectado firme a un mercado internacional,
especialmente europeo, con un producto que es similar al que actualmente se
desarrolla en los cultivos de cacao en Tamshiyacu, donde la empresa Cacao del
Perú Norte se ha puesto sobre los hombros un reto sumamente difícil, que es
posesionarse en la producción de granos de calidad para competir con otros
exportadores.
Esta opción es sumamente interesante, aunque igual que en muchos
lugares, encontrará sus opositores, pero sin embargo el Proyecto Cacao en
Tamshiyacu ha generado un nuevo giro a la historia, ha establecido una nueva
base económica para el desarrollo sostenible en Loreto con acciones amigables
con la naturaleza y el ambiente. El cacao ecuatoriano es el orgullo de agricultores
e hijos de ese país y de América, pero lo que queda claro que esa variedad se ha
logrado como resultado de un clon donde el patrón genético es peruano, es de
Iquitos. Con lo que se quiere decir que el mejor cacao del mundo es loretano.
Bibliografía:
Información referencial del artículo “El cacao CCN-51 pasó de patito feo a cisne de la producción ecuatoriana” publicado por el Diario EL COMERCIO en la siguiente
Información referencial del artículo “El cacao CCN-51 pasó de patito feo a cisne de la producción ecuatoriana” publicado por el Diario EL COMERCIO en la siguiente