Por:
Raúl Herrera Soria
El reto
Manantay sigue siendo invencible para los políticos ucayalinos. Es que ninguno
de los dos gobiernos municipales, que hasta la fecha ha tenido este distrito
perteneciente a la provincia de Coronel Portillo y ubicado en la ciudad de
Pucallpa, ha sido capaz de dar pasos significativos para su desarrollo.
Sus
carencias son notables, su poco orden urbanístico, su descontrol sobre las actividades
económicas, comerciales y su caótica administración descubren su crisis
institucional en la que el directamente perjudicado es el pueblo.
Manantay creado como distrito mediante Ley Nº
28753 del 6 de junio de 2006, ha tenido hasta la fecha solamente dos elecciones
de autoridades municipales, ambas con su desafortunada equivocación. Primero,
Guillermo Cornelio Chino Mori el 2010 quien ganó con una diferencia de 308
votos y luego el 2014, fue elegido Said Torres Guerra con una marcada diferencia
de votos, que por situaciones de corrupción fue a dar a la cárcel siendo sucedido
por el primer regidor Julio Gómez Romero quien falleció recientemente y ahora en
lo que resta de la gestión con su primea alcaldesa, Ketty Elizabeth Sánchez Fasabi,
los manantaínos no han podido salirse de donde se encuentran, de su situación
realmente caótica.
El reto para el próximo alcalde será hacer de
todo, porque la situación está en nada. Por donde se transite se encontrará con
un distrito al que le falta todo, especialmente un líder que gobierno
adecuadamente el destino de esta urbe marcada por el atraso frente al avance,
que es innegable reconocer, que se experimenta en el resto de la ciudad de
Pucallpa.
Está en manos de la población abordar
posiciones serias, pensadas e informadas al momento de decidir su voto. No se
trata de “ayudar” con el voto a la cara sonriente, “devolver” la dadiva recibida,
“apoyar” el color del movimiento o partido político, o pensar en el pobrecito
al que hay que darle “su oportunidad”. Las cosas son diferentes ahora, el
ciudadano debe votar conscientemente, seguro de que su voto no debe ser
equivocado y volver a lamentarse 4 años más. Ver en su candidato, a un alcalde
con el perfil de gestionador ante las instancias donde debe encontrar la
financiación necesaria para hacer obras y desarrollar social y económicamente a
su pueblo.